sábado, 26 de octubre de 2013

"¿Quieles venil a mi casa?"

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Mira, te cuento el final. Ella estaba en el 3º piso y desde arriba, ella agitaba la mano despidiéndose. Yo le decía "hasta mañana" desde unos pisos más abajo, mientras ella estaba cerca de la puerta de su casa desnuda y envuelta solamente por una toalla.


Volviendo al punto de inicio. La conocí aquí .Quedamos bien pronto por la tarde, y ella me acompañó a comprar un regalo para un familiar. Iba vestida con un vestido azul, acompañada de unas gafas fashion y un estilo más bien europeo encima de un cuerpo oriental. Por la parte de arriba del vestido, se podía divisar dos grandes montañas de la pradera de Heidi. Eran bien redondas, y bien grandes. Cosa que me extrañó, pues yo tenía asociada a las chinas con pechos pequeños y juguetones. De todas formas, había sumado puntos. La cara no es que sea especialmente guapa, no deja de tener ojos rasgados y cara tirando a redonda, pero me gustaba. Además, como dije en el anterior post, tiene piel morena... lo cual le da un toque aún más exótico, al menos para mi.




Después, estuvimos tomando algo en una cafetería. Como no, cada uno sacando sus armas. Yo por supuesto, intentaba ser yo mismo, explicarle cuales eran mis visiones e intentar encontrar puntos en común. Ella actuaba con risas tímidas y un español incluso gracioso. No es la típica china que dice: "quielo una cuchala glande". Ella había estudiado español muchos años y tenia una pronunciación bastante buena. Pero al mismo tiempo, era gracioso.


Le sugerí a un parque que hay en mi ciudad. Siempre suelo llevar a las chicas ahí, porque es un lugar que poca gente conoce, que solo se puede acceder en coche y que seguro, conquista. Una de mis pequeñas armas. Y funcionó. Estuvimos paseando y hablando de todo. Era el momento de entrar en temas más profundos. Le pregunté directamente cuantas relaciones había tenido con el objetivo de sonsacar más información sobre ella. Por un momento, pensé que metí la pata. 

Las personas asiáticas son gente de cultura conservadora, precavida y reservada. Preguntar algo así en europa, puede ser incluso normal después de tener una cierta confianza, pero a este tipo de personas, es casi tabú. Cuando directamente me explicó sus experiencias, entendí que tenía una gran influencia Europea y por el resto del mundo. Por un lado me gustó, porque sabía que iba a ser más sencillo atacar pero por otro lado, cierta magia desaparecido. De todas maneras, me hizo entender que es una chica con experiencia, que además estuvo con varios españoles y que tiene una cierta atracción por ellos, por lo que parece.


Cuando la dejé en su casa, fue uno de estos momentos para apuntar en el blog de notas. A modo de broma, le dije cuanto tenía que pagar por el servicio de taxi, aunque yo insistí que podía pagarlo con cariño. Ella riéndose, tímida y con solo media cara visible, me dio 3 besos. Dos en cada mejilla y una en la lengua que casi me succionó todo el poder que tenía dentro de mi. Sentí que se tragaba mis vísceras e incluso mi alma.


Por el amor de Dios, ¿de verdad besan así las chinas? Creo que jamás en la vida había llegado tan lejos con mi lengua en la boca de otra tía. Eso si era un beso apasionado como dios manda, nada que envidiar a los europeos o latinos. Que sorpresa, joder. Y todo esto, con un par de coches atrás esperando a que nos moviéramos en medio de la calle. Así que, me subí encima de la acera, y proseguimos con nuestra succión. Las cosa se ponía demasiada caliente, y yo le tocaba la pierna, los pechos, y... aquí vino la prueba de fuego. En cuanto me acerqué a sus partes bajas, ¿cual fue su respuesta?

Dejármelo más fácil para acceder. Abrió las piernas como un alicates. ¿Cómo? ¿Tan fácil es todo? A china me tengo que ir ahora mismo. Y entonces escuché las palabras mágicas saliendo de ella, con un acento más "tienda chino 1 euro todo":
- ¿Quieles venil a mi casa? ¿O no?
¡¿Cómo?! Imaginaos mi cara de estupefacto.





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