jueves, 24 de octubre de 2013

Las odio

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Soy pobre, lo admito. Pero lo poco que tengo, lo comparto con la gente que quiero. Pero me repatea que todavía existan mujeres que solo le interesen la fortuna de los demás. Sobretodo cuando su actitud cambia a la velocidad de la luz en cuanto detectan dinero.



Un día conocí a una chica en una discoteca la cual parecía la mar de simpática. Estuvimos hablando entre música, ruido y rayos de luz, fue incluso especial porque a pesar de toda esa banda sonora de fondo, pudimos crear un ambiente cálido y confortable sin pensar en los demás. Yo me dedico a un sector donde el sueldo medio está más que presente, y además, cambio de empresa día si día no, por lo que es inestable. No sé que puñetas tuvo esta chica conmigo, pero era demasiada guapa para mi, pensaba yo. Y no es que físicamente parezca una mierda seca de hace 22 días, pero tampoco soy un "humbrusymujurusyviceversa" en Estuvimos horas bailando, cada vez más apretados y cuerpo con cuerpo. Yo pensaba: -esta noche es la mía. 

Tengo un queridísimo y fiel Seat Ibiza del año 2000, con sus heridas de guerra que represetan sabiduría, experiencia y largos recorridos de ahí a allá. No es bonito verlo, pero cae bien cuando lo conoces. El caso es que fue salir con esta mujerzuela a mi coche, verlo, y decirme:

- ¿Ese es tu coche?
- Si, ¿por qué?
- No nada, me esperaba otra cosa...
- ¿Esperabas un deportivo lujoso?
- No, que va... pero creo que tu y yo no pegamos.
- Con cara de descompuesto... - ¿Cómo?
- Si, lo siento... me llama mi amigo, tengo que irme... adiós guapo, lo siento!

Vi este vídeo, y me acordé. Hoy tú eres mi héroe.

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